En el discurrir de nuestros días la naturaleza trabaja silenciosa e incansablemente poniendo en marcha procesos que, por naturales y cotidianos, solemos olvidar que están allí, haciendo que nuestro mundo continúe andando. Son servicios, pero de la naturaleza y gratuitos. De modo que muchas veces no los valoramos como merecen.
Ver Artículo Completo