A contracorriente de la mayoría de los países, que confinan a la población en sus casas para luchar contra el nuevo coronavirus, Suecia optó por otra estrategia que excluye el cierre de escuelas, restaurantes y bares.
A contracorriente de la mayoría de los países, que confinan a la población en sus casas para luchar contra el nuevo coronavirus, Suecia optó por otra estrategia que excluye el cierre de escuelas, restaurantes y bares.